Los primeros pasos para crear una empresa

Para tener éxito en tu proyecto debes bien el sector en el que vas a introducirte. Recurre a información para analizar la demanda y los consumidores, la competencia, los proveedores y las formas de distribución, las circunstancias socioeconómicas del territorio donde operarás, asociacionismo, legislación y normativas que pueden condicionar tu actividad, tecnología e innovaciones en el mercado. No puedes ignorar ninguno de estos factores si deseas entrar en el sector de forma competitiva. El punto de partida entonces sería un estudio de mercado.

Los trámites y forma jurídica
Toda empresa debe cumplimentar obligatoriamente una serie de trámites jurídicos y administrativos básicos antes de emprender su actividad, independientemente de la forma jurídica que adopte. Para más detalles puedes consultar: www.crear-empresas.com
Debes tener en cuenta una serie de factores antes de decidir la forma jurídica que adoptará tu negocio. La actividad que vaya a desarrollar la empresa, el número de socios, la cuantía del capital social, las obligaciones fiscales y la responsabilidad frente a terceros pueden condicionar tu elección.
Surgimiento de una idea
La opción que escojas a la hora de decidirte por un negocio concreto estará influenciada por muchos factores. Entre estos condicionantes figuran:
- necesidades de mercado que no están cubiertas: nueva oportunidad de negocio.
- necesidades de mercado que consideras que pueden satisfacerse de un modo más adecuado, bien porque el mercado sea de nueva creación, esté poco abastecido o tenga un alto porcentaje de crecimiento.
- la imitación de un modelo de negocio que te interesa especialmente o que consideras que funciona de forma adecuada.
- los conocimientos adquiridos o tu trayectoria profesional en sectores o mercados concretos, que te llevan a plantear un nuevo negocio aunque este pueda ya existir.
- un producto innovador en torno al cual hay expectativas de generar mercado.
- la detección de cambios de mercado o de nuevas tendencias en el comportamiento del consumidor.

Viabilidad
Será determinante para el éxito o fracaso de la empresa que desarrolles tu idea bajo parámetros que te permitan constatar que el objetivo a alcanzar es viable y realista. El futuro del proyecto que elabores a continuación dependerá de la solidez de este primer paso.
Antes de analizar con detalle tu proyecto y proceder a la realización del Plan de Empresa es fundamental que evalúes la idea de la que partes basándote en criterios realistas y objetivos. En ese sentido deberías responder a una serie de cuestiones tales como: ¿Es realista mi idea? ¿La rentabilidad justifica desplegar tal esfuerzo? ¿Es viable económicamente? ¿Y técnicamente? ¿Estoy en condiciones de acometerla?
No es bueno dejar nada a la improvisación. Cualquier problema que intuyas en un principio y que no resuelvas en primer término se convertirá en un obstáculo que puede llegar a echar por tierra tu esfuerzo. Tener la máxima información sobre el producto y las variables relacionadas con él o, en su caso, sobre el servicio que sea centro de tu idea, evitará errores de planteamiento que pueden originar dificultades insalvables cuando ya has comenzado la inversión económica en tu proyecto.

Estructuración del proyecto
Una vez que hayas definido tu idea deberás elaborar un Plan de Negocio. Se trata de un estudio sistemático de todos los factores que influirán, o podrían influir, en tu actividad empresarial. Debes detallar de forma organizada toda la información relacionada con la puesta en marcha de tu actividad, procurando no dejar cabos sueltos para reducir significativamente el grado de riesgo que afrontas. Además este Plan de Negocio será una eficaz tarjeta de presentación, fundamental a la hora de buscar la colaboración económica de entidades o inversores. Te permitirá analizar las desviaciones de tu previsión inicial. Te ayudará a solucionar de forma eficiente posibles errores y disminuirá la probabilidad de que cometas equivocaciones.