Franquicia Plastimania consiente a los reyes de la casa

Esto también ha obligado a crear más y mejores productos, así como servicios, que no sólo satisfagan la necesidad comercial de "los reyes del hogar", sino que fortalezcan en ellos habilidades y valores.

Creaciones de plastilina

Usando la plastilina como su herramienta, Leticia Pérez diseñó un sistema llamado Plastimanía, que ayuda a los niños a crear figuras de este material sin que sea imperativo que tengan habilidades manuales.

"Nosotros logramos que cualquier persona, aun sin habilidad manual, haga figuritas de plastilina. Nuestro equipo incluye una maqueta hecha de plastilina, que puede ser de la fauna de México, la granja, la fauna del planeta, el mar y el Polo Norte. El niño se acerca, escoge la figurita que quiere realizar y se le da la metodología para que lo logre.

"La figura, a la que se le ponen accesorios, se coloca en una base de madera y al final el niño se la lleva como recuerdo. Con este tipo de trabajo hay una gran convivencia familiar. Además, los niños logran desarrollar habilidad, psicomotricidad, paciencia y creatividad", detalló la fundadora de Plastimanía.

Aunque Pérez desarrolló esta idea para entretener a su hijo, hoy se ha convertido en un negocio flexible y rentable, que permite a sus franquiciatarios tener la satisfacción de convivir con niños y generar recursos.

"Nuestra empresa se dedica a llevar talleres de plastilina artística a fiestas infantiles, reuniones empresariales, de gobierno y plazas comerciales, por lo que la labor del franquiciatario es buscar estas actividades.

"Una de las ventajas es que si la persona tiene un trabajo entre semana, puede seguir con éste y operar el negocio de Plastimanía los fines de semana. El negocio también se adapta a la perfección con mujeres que son mamás", indicó.

Añadió que la flexibilidad del concepto no está peleada con la rentabilidad. "Con que tengan dos eventos a la semana de 40 niños, el negocio es rentable. La recuperación de la inversión se da entre 12 y 18 meses", explicó.

La cuota de entrada es de 150 mil pesos y se requiere de una inversión adicional de 62 mil pesos para la adquisición de equipo. El stock inicial incluye mil paquetes con accesorios, plastilina e instructivos para igual número de figuras, una maqueta, mesas y banquitos para las fiestas.

No se requiere un local y se puede operar desde casa. Cobran regalías fijas de mil pesos mensuales más 500 pesos para publicidad.

Están certificados para otorgar financiamiento mediante el Programa Nacional de Franquicias (PNF).

Juguetes con valores

Mientras que la tendencia de la industria del juguete ha sido crear productos que promuevan estereotipos estéticos y sociales, e incluso la violencia, Imaginarium, empresa de origen español, ha decidido ir contra la corriente y está ofreciendo a sus pequeños clientes juguetes que promueven el desarrollo artístico, científico y psicomotor, el cuidado a la ecología, y valores universales como la igualdad, la bondad y el respeto.

"Nosotros siempre hemos creído que jugar durante la niñez será una experiencia crucial en la vida de cualquier persona, por ello nos hemos dado a la tarea de recuperar la verdadera esencia del juguete", comentó el presidente y fundador de Imaginarium, Félix Tena.

La empresa tiene tanta confianza en el mercado mexicano que están invirtiendo 12 millones de pesos en su proyecto de expansión, que prevé la apertura de nueve sucursales y ampliar su presencia en tiendas departamentales.

Bonifacio Pérez, director de Negocios y Marketing Relacional de la empresa, indicó que México se ha convertido en el quinto país más importante para la empresa con tan sólo año y medio de operar aquí, por ello decidieron crear una filial.

Esta medida también les está permitiendo hacer el trámite para certificarse ante el PNF, con el que podrán ofrecer a sus inversionistas un financiamiento de 50 por ciento de la cuota de entrada, a 36 meses, tasa cero.

Respecto a su mercado en nuestro país, el directivo señaló que México es un país muy grandes, en constante desarrollo y con familias jóvenes que representan un mercado muy atractivo. Sin embargo, reconoció que son una tienda de nicho, el cual no está delimitado por el aspecto económico --tienen productos desde los diez hasta los ocho mil pesos--, sino por el intelectual.

Las personas interesadas en abrir una unidad deberán contar con un capital de un millón 800 mil pesos y comulgar con los valores de la empresa. La recuperación de la inversión está estimada entre 36 y 42 meses.