Starbucks, con 39 años de experiencia, ingresará a un mercado bastante nuevo, puesto que fue hasta el año pasado cuando en el país proliferó la apertura y expansión de estos establecimientos dedicados a la comercialización de bebidas basadas en el café.
Las coffee shops nacionales reconocen que esta compañía, fundada en Seattle, Washington, Estados Unidos; será una competencia fuerte, y por ello están a la expectativa de su llegada. Sin embargo, afirman que ofrecer café 100% nacional, y no como parte de una mezcla, es el factor que hará que los salvadoreños mantengan su preferencia.
Los propietarios de tiendas de café consultados indican que el salvadoreño debe profundizar el gusto por su propio café. Con esto, benefician a los caficultores locales, a través de un fuerte estímulo a la demanda del grano.
"Creo que eso (vender café salvadoreño) es el punto diferenciador. Los salvadoreños debemos consumir café salvadoreño. Al consumir productos salvadoreños, dinamizamos la economía, generamos más empleos", dice Lily de Bolaños, propietaria de Viva Espresso. Bolaños agrega que la llegada de Starbucks contribuirá a dinamizar aún más el mercado del café en el país, una situación que se tornará positiva para toda la cadena de comercialización del grano.
El concepto que las tiendas de café ofrecen al consumidor también es un punto fundamental a la hora de disputarse las preferencias.
Por eso, Benoit Gravel, dueño de Ben's Coffee, no considera que Startbucks sea una competencia para su empresa, puesto que el concepto de su tienda está muy bien posicionada y definida.
"El problema real es para los cafés que no tiene un concepto novedoso y bien posicionado en la mente de los consumidores, a ellos sí les podría afectar la venida de Starbucks", dijo.
La empresa estadounidense, opina, es muy comercial y carece de especialización en materia de bebidas de café. En cambio, Ben's Coffee cuenta con baristas (profesionales de la preparación de bebidas basadas en café) especializados en el arte latte.
Leyla de Quirós, directora ejecutiva de The Coffee Cup, afirma que "es excelente que venga Starbucks", pero, como sus colegas, cree que será el cliente el que tenga la última palabra.
"Todos los cafés son competencia, pero cada uno tiene lo propio, cada uno tiene su concepto", comenta.
Jonathan Rodríguez, dueño de Café Au Lait, ubicado de Plaza Merliot, afirma que aunque la compañía es una gran compentencia para los cafés pequeños, no temen por que no vendrá a ofrecer un concepto novedoso. "La verdad, es un coffee shop más. Starbucks no es alguien que viene a hacer algo novedoso", indica.
El Mundo